Mi hijo no me entiende !!

MI HIJO NO ME ENTIENDE

"Mi hijo no me entiende".

Quizá os suene esta expresión queridos padres. O era aquella otra cantinela que decía "mis padres no me entienden". En cualquiera de los dos casos, ambas demuestran  una falta de comunicación real entre dos generaciones, dos modos de ser y de entender la vida.

Pero esto siempre ha sido así, podemos decir hoy. Pues no les digo yo que no, pero hoy tenemos todos una edad muy mala, ellos quizá demasiado jóvenes y nosotros quizá un poco más mayores, y sobre todo, unos y otros, unos valores muy distintos.

Porque tenemos unos valores distintos, ¿no?.

 La primera pregunta que debemos hacernos es ¿cuales son mis valores?.  Entendiendo los valores como los mimbres que conforman la estructura real de nuestros pensamientos, actitudes, creencias, conducta y relaciones. Todo aquello que nos orienta a ser o no ser, a hacer o no hacer, que nos motiva o nos hace evitar ciertas circunstancias.Y llegados a este punto, ser capaces de identificar lo ocho o diez valores que rigen nuestra vida.

Este es el primer ejercicio que tenemos que realizar individualmente para poder acercarnos a nuestros hijos desde la honestidad y sincera franqueza, que abra nuestros corazones.

Desde el blog "Juventud y Valores", que pusimos en marcha César Espina y un servidor a principios de 2014, abrimos un espacio para ayudaros a realizar esta reflexión, con más de sesenta valores , que nos dan una pista fiel y completa de este universo al que por mucho que le demos la espalda, nos vamos a enfrentar a el día a día. Como decía Ortega las ideas nos vienen, pero en las creencias, y yo añado en los valores, estamos.

Por lo tanto, padres y amigos, hagamos nosotros primero esta profunda reflexión  que seguro nos va abrir la puerta de la comunicación y la confíanza con nuestros hijos entorno a los valores. Este tiempo no es tiempo perdido, sino todo lo contrario, es una inversión en la relación con nuestros hijos de hoy para siempre. Sabiendo que no hay nada que no se pueda cambiar, adaptar y mejorar.

Así nuestros hijos, quizá en un futuro, dejen de hacerse la misma pregunta que nos hacemos nosotros hoy; "mis hijos no me entienden".


                                                                                                                                                                   José Luis Talavante
                                                                                                                                                      Psicólogo y Coach Personal